martes, enero 27, 2009

Yo paso y me saludan bajo la sombra del Abasto

Hace millones de años, en mi inocencia palermitana -cuando todavía Palermo no se había comido a los barrios aledaños- el Abasto era un barrio absolutamente border, poblado de orilleros y leyendas non sanctas. De ahí venían las flores que compraba mi viejo para llenar la casa en madrugones maniáticos, y también las frutas y verduras para alimentar a un regimiento invisible, tras su largo derrotero de minoristas e intermediarios. Alguna vez recorrí los pasillos del viejo mercado y también es probable que haya acompañado a mi madre en pos de mercerías y ofertas de ocasión. Pasó el tiempo y la ciudad se achicó hasta caber entera en mi bicicleta y ahora tengo la enorme alegría de pedalear esas calles como si fueran mías. Esta larga y cursi introducción tiene que ver con el azar y su circunstancia, que hicieron que me tocará juntarme con algunas personas y proyectos de este porteñísimo barrio. El Abasto tiene la virtud de reconocerse a sí mismo, tal como lo demuestra la red RIOBA:

Luego de haber atravesado la crisis social e institucional del 2001, un número importante de instituciones y ONGs comenzaron a llevar en forma conjunta acciones sociales y culturales que fueron favoreciendo la complementariedad y efectividad en las tareas barriales. Por ello, en el año 2006 se conformó la RED RIOBA (red de instituciones Once, Balvanera, Abasto)con las siguientes bases y principios:

  • Trabajar con sus actores en un plano de igualdad política.

  • Considerar las diferencias e intereses entre los grupos y consolidar los consensos que permitan cumplir los objetivos de trabajo.

  • Construir un lenguaje común que facilite la comunicación horizontal entre las diferentes asociaciones comprometidas en este proyecto colectivo.

  • Diseñar y llevar adelante prácticas de deliberación y toma de decisiones que tengan en cuenta los acuerdos generados, y gestionar colectivamente poniendo en marcha mecanismos de evaluación de las acciones propuestas y de sus resultados en forma conjunta.

Esta gente viene juntándose desde hace tiempo para explorar su identidad a través de las acciones más variadas. Buenos Aires, al fin y al cabo, es un merengue encantador atravesado por las crisis, y los porteños muestran su mejor cara cuando sacan las sillas a la vereda y se animan a mirarse uno a otro a los ojos.




Lyrics

No hay comentarios.: