Mucho antes de lo que hubiera imaginado me tocó volver a Recife. La gente de Porto Digital me invitó a hacer una presentación sobre distintas estrategias de promoción a la economía creativa en el marco de Recife Summer School y hacia allí partí a principios de febrero, con mucho entusiasmo y bastante paciencia para aguantar las 10 horas de tránsito (dos escalas, dos cambios de avión).
Porto Digital funciona en un antiguo edificio reciclado
A la presentación habitual de nuestros programas agregué una CODA en la que incluí nuevas estrategias vinculadas a las industrias creativas, la participación social y el uso de la tecnología en las ciudades. La gente de Porto Digital está detrás de un proyecto que lanzarán en unos meses llamado Delta Zero y que pretende impulsar la economía creativa de Recife. La ciudad es reconocida en el resto de Brasil por su boémia, vinculada a los poetas y los bares, y posee también una base interesante de creadores audiovisuales, incluyendo un polo relevante en materia de videojuegos.
Eltrabajo fue elaborado por la consultora KEA y presenta una serie de propuestas interesantes y casi originales sobre la promoción de la creatividad. Arriesgando un listado no taxativo, van algunas de las mejores ideas:
Integration of design thinking in business
"Artist in residence" projects (in companies)
"Creative broker" facilities
The establishment of creative clusters (y en eso estamos nosotros, con el Distrito Audiovisual y el Distrito de Diseño)
Establishment of a "Creative industries bank"
Sin dinero para pagar grandes proyectos de consultoría (y, de todos modos, sin mucha confianza en su hipotético resultado), viene bien aprovechar las mejoras prácticas ajenas para ver qué lecciones adaptar a nuestra realidad.
Sigue el recuento desordenado de mi paso por Rio de Janeiro. El martes 30 de marzo tuve que saltearme las charlas de la mañana porque había agendado un par de reuniones. El día comenzó con mi encuentro con Steve Solot, responsable de la Film Commission de Rio de Janeiro, a quien había conocido a fines del año pasado en Buenos Aires, en ocasión de la reunión que organizamos durante Ventana Sur. Steve es un norteamericano afincado en Brasil que conoce a la industria audiovisual como pocos. Rio le debe haber pagado su peso en oro para tenerlo al frente de sus esfuerzos para atraer a las productoras internacionales. Conversamos con Solot sobre la posibilidad de aprovechar su experiencia para capacitar a productoras de Buenos Aires y luego insertarlas en el mercado de Estados Unidos.
Almorcé con Anuk Piket, Directora de Caramundo. Anuk, holandesa, reparte su tiempo entre Amsterdam y Rio mientras impulsa toda una serie de proyectos de alcance social/creativo. Me interesaba el contacto para ver si era posible sumar a nuestro programa Inclusión Creativa al proyecto Darua, colaborando nosotros en la vinculación con colectivos artísticos y sociales de la ciudad.
Durante la tarde se produjo el cierre del encuentro (en la foto de acá arriba el representante de La Plata cuenta los objetivos de la próxima reunión de Mercociudades que se realizará en su ciudad).
Después de un breve descanso partí para la Praça Tiradentes para participar de la inauguración oficial del Centro Carioca de Design. Las palabras de apertura estuvieron a cargo de Paula de Oliveira Camargo, Gerente del Centro, Washington Fajardo, Subsecretario de Patrimonio Cultural de Rio de Janeiro, y Jandira Feghali, Secretaria de Cultura de la ciudad.
El Centro Carioca do Design está ubicado en una casa antigua, reciclada, en la parte comercial del centro de Rio. Es una apuesta interesante de la Prefeitura por intentar revitalizar una zona bastante degradada. El encuentro sobre políticas de diseño, que se realizó al día siguiente, tuvo como objetivo justamente dar recomendaciones al flamante Centro Carioca.
La noche terminó en el Centro Cultural Carioca, en una casa que de tan linda parecía una escenografía. Escuchamos choro hasta tarde acicalados por la cerveza. Después pusieron un DVD de un recital de Vinicius, Tom Jobim, Toquinho y Miúcha y aplaudí cada tema como si estuviera ahí. Mientras tanto, afuera, caían las águas de março...
Finalmente, la segunda estrella del panel fue Ana Carla Fonseca Reis, consultora especializada en economía creativa, que centró su presentación en ciudades creativas y tendencias. La última crisis económica pone en cuestión qué modelo queremos seguir. Hay que apuntar, dijo Ana Carla, a generar la capacidad de pensar diferente. Las ciudades deben generar espacios creativos (intervenciones puntuales) y clusters. Las ciudades creativas sorprenden, valorizan la singularidad y generan conexiones.
Entre otros conceptos, mencionó que las ciudades no se hacen bonitas para conquistar a alguien cual adolescentes (modelo Richard Florida) sino que se la pasan bien y se nota todos querrán venir. Al igual que Sá Earp, identificó a la desigualdad como el gran problema y planteó el desafío de crear un sueño genuinamente colectivo. Al final, ofreció de regalo un e-book que desarrolló junto a varios especialistas en economía creativa. En el espacio de preguntas ofrecí una sugerencia (¡nadie se atiene a la consigna de formular una pregunta!): armar un archivo online de buenas prácticas en ciudades creativas del mundo en desarrollo, ya que vivimos estudiando modelos que luego no podemos aplicar.
La mesa siguiente estuvo dedicada al patrimonio histórico, aunque también hubo lugar para una presentación sobre el programa de apoyo a los artesanos en Cuenca, Ecuador.
Finalmente, llegó el turno de nuestra mesa. Me tocó abrir el panel presentando las actividades de promoción del diseño y las industrias creativas en la Ciudad de Buenos Aires. Como ya me ha sucedido en Brasil, todos quedaron muy impresionados por nuestro enfoque ligado al desarrollo económico y plantearon la necesidad de avanzar en esa dirección.
Después habló Luciane Gargulho, responsable del Departamento de Cultura, Entretenimiento y Turismo en el BNDES. Qué decirles... ¡muero de envidia por el trabajo que está haciendo el BNDES! Durante 2009 invirtieron más plata que el Banco Mundial y el BID juntos. En materia de cultura apoyan con subsidios y créditos blandísimos a todos los sectores pero con particular énfasis en el audiovisual. Hubo tiempo para presentar pros y contras de la Ley Rouanet (crítica: transfiere decisiones al sector privado y genera dependencia de los incentivos, entre otras) y de la Ley de Apoyo al Sector Audiovisual de 1995 (no apoya a los distribuidores nacionales y no hay mecanismo de apoyo a la exhibición, lo que genera una superproducción de cine brasileño que nadie quiere ver). Ya están trabajando en reformar estas leyes y el BNDES viene invirtiendo en el sector de cine con un enfoque puesto en resultados, boletería y planes de negocios sustentables por parte de las productoras. También tienen líneas de crédito a largo plazo, con garantías alternativas y flexibilización en las reglas de riesgo. Entre otras cosas, contribuyeron a crear 70 nuevas salas en los últimos años y quieren que aparezcan 600 más en los próximos 3. Fue una lección de política de estado planificada a largo plazo. Chapeau!
Finalmente, cerró la mesa Edgar García, responsable del área de servicios de desarrollo empresarial del Instituto Catalán de las Industrias Culturales (ICIC). La institución tiene un presupuesto de 72 millones de euros al año, 80% del cual es transferido de una u otra forma al sector privado. Tienen una línea de trabajo muy sólida, a la que consultamos regularmente para tomar ideas sobre buenas prácticas, en particular en lo referido al sector audiovisual. El trabajo de Edgar es muy interesante porque brindan consultoría, formación y subsidios para fomentar el desarrollo empresarial.
Al final de la charla tuve oportunidad de conversar con Joaquim Redig y Tulio Mareante sobre un proyecto que estamos impulsando junto a la Prefeitura do Rio para organizar un workshop intensivo entre diseñadores de nuestras ciudades.
Después de la cena, la Prefeitura nos invitó a un espectáculo de danza exquisito en el Teatro Municipal Carlos Gomes, y como cierre tuvimos el inmenso honor de tenerla a Lenny Andrade cantando para nosotros. Algunos valientes cerramos el día tomando unas caipirinhas en Lapa mientras llovía en la noche carioca.
La foto está sacada desde la ventana de mi habitación en el Hotel Novo Mundo, lugar en el que se desarrolló el Seminário Cultura e Economia Criativa: instrumentos para a construção de uma agenda para as Mercocidades organizado por la Prefeitura de Rio de Janeiro. Como en otros viajes, la ciudad transcurría en otro lado mientras nos sometían a un encierro de lujo. Por supuesto, no me quejo. Estos encuentros son una increíble oportunidad para aprender de las mejores prácticas de otros países y regiones y, sobre todo, para hacer contactos que luego podrán ser aplicados en la gestión.
No logro dar con el programa del evento online por lo que comparto aquí sólo algunas notas desordenadas.
Luego de la mesa de apertura (tan larga, aburrida y política como en cualquier otro lado) el uruguayo José Alonso hizo una presentación sólida y entretenida sobre los desafíos regulatorios de la era digital para la economía creativa. Sirvió para provocar a un auditorio todavía muy ligado a la promoción cultural analógica. Después vino la presentación del Director local de PriceWaterhouseCoopers de su informe "Global Entertainment & Media Outlook 2009-2013", muy optimista con nuestra región.
La segunda mesa, coordinada por María Victoria Alcaraz, fue realmente interesante, en particular por dos intervenciones que fueron un lujo. Fábio Sá Earp, del GENT - Grupo de Pesquisas em Economia do Entretenimiento - de la UFRJ, dio una charla encantadora con recomendaciones prácticas para promover las industrias creativas en Rio. Ofreció una relectura de los conceptos impulsados por Richard Florida, postulando la necesidad desarrollar dos frentes: Ambientes propicios para la instalación de negocios; y ambientes propicios para una vida agradable. Mencionó que Brasil es un país muy tolerante pero agregó que se discrimina fuertemente al pobre. Entre muchos ejemplos propuso el "criterio de la borracha" para las ciudades, es decir, qué tan segura es la ciudad para una muchacha que sale de copas y vuelve caminando sola a su casa, vestida para matar y muy mareada.
Planteó también una interesante discusión sobre la necesidad de contar con un museo de clase mundial, así como también un muy buen acuario. El dilema para nuestras ciudades tiene que ver con hacer una gran apuesta o diversificar el impacto de la inversión pública. Mencionó también la necesidad de apoyar el desarrollo de ferias artísticas de calidad y alcance (puso como ejemplo a nuestra ArteBA) y también las ferias callejeras de asistencia masiva (ilustró esta sección con fotos de las ferias de Londres).