La utilizo mal, por supuesto. Yy la verdade s que pcoo me importa. Mezclo el vos con el tú en un cóctel verbal que ha permitido que me confundan con paraguayo, con colombiano, con peruano, o con argentino de alguna provincia perdida de la mano de Dios. O simplemente con latinoamericano. Así, a secas, como si esa voz de la época de Napoleón III incorporara en sus pocas letras mi identidad en peligro.
(...)
Cuando escucho aquello de la Latinoamericanización de la Argentina, siento que formo parte de una invasión caníbal. Una de tantas. Somos los caníbales, me digo, a los que teme Europa, y este recoveco rezagado de Europa. Sí, soy un caníbal. Un tipo venido para desordenar, para confundir, para incomodar, a pesar de que el resultado final sea mi propio desorden, confusión e incomodidad. De cualquier forma me gusta ubicarme en ese rol engañoso e intimidante, mezcla de patotero latinoamericano con doctor en letras. Por supuesto nadie se lo cree, pues primero haría falta echar mano de algunas herramientas pintorescas (abusar de las guayaberas, beber piña colada) y yo odio disfrazarme d elos reyes del mambo, y aborrezco las bebidas alcohólicas dulces. ¡Qué cagada!, pienso, pues todos sabemos que, en cualquier lugar del mundo, a cualquier nacional le gusta el extranjero, siempre y cuando éste se muestre exótico.
Este blog se murió. Ahora solo es el eco fantasmagórico de las notas que publico en https://medium.com/@eavogadro
viernes, mayo 22, 2009
Babel mirando al río
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1 comentario:
Para Twitter Freaks!
hola te sigo seguime
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